domingo, 21 de diciembre de 2014

Veintiseis

Le pedí a estas lágrimas  no llorar y a estos latidos tristes  no sufrir. Mis manos desbastadas por lo cotidiano no pudieron escribir mas  promesas para retenerte. El alquiler de las ilusiones era demasiado caro. Cubiertos por un cielo  duro, quedaron solo mis brazos para envolverte y el silencio no sirvió para entibiar tú pecho, de donde poco a poco me arrancaste sin dolor.

lunes, 24 de noviembre de 2014

Veinticinco

Y,  las lágrimas cuando se destrozan las manos; y, la sangre cuando los corazones se apagan ahogados en realidad ; y, la tristeza cuando desaparece la esperanza;  y, el olvido  cuando los rostros se disfrazan con arrugas. ¿Dónde esta todo eso?.

Veinticuatro

En el frasco verde,  donde compramos la miel este verano, en el que  pintaste una guarda de jazmines, ahí encontré escondido un beso tuyo, ¿es  mío?, porque de otro modo no lo entendería.

Veintitres

He vaciado de lagrimas mis ojos en tú pequeño cuerpo montañoso. No borres mi huella. Guarda algo de tristeza, no te pido mucha, quiero seguir creyendo en tu promesa: "Cuando no estés, moriré de tristeza".

jueves, 24 de julio de 2014

Veintidos

Embarrado de vida, con la piel ensombrecida por el sol, los ojos enceguecidos por el asombro de escuchar tantas mentiras, tenía en sus manos un cumulo de luna temblorosa, y en sus oídos el cálido sonido que nace a nuevas y frágiles palabras diciendole que lo amaban.

Veintiuno

Esa noche en un rincon de mi cuerpo que apenas respiraba, tus palabras de seda buscaron mi alma amedrentada. Míre de reojo tu boca madura, tus labios endulzados por el deseo, apasionados, escuche los zuzurros de flores amarillas que iban y venian para confesarte mis últimos secretos. Dejaste caer tú cuerpo que flotaba entre mis brazos. Mis manos artesanas tallaron gestos en tú alma. Mi pequeña manzana, de piel veteada, he trepado el árbol donde maduras, he roto el tiempo para acortarlo, no me canso del recorrido de tú cuerpo, tan distinto cada mañana, cuando se derrama sobre mi pecho y renace en silencio entre mis tristezas impalpables para volver donde estabas.

jueves, 3 de julio de 2014

Veinte

Mientras me regalabas tus besos prohibidos, un rocio de luna tejia hilos de trigo en tu cabello. Tú piel impecable y tus ojos transparentes querian mis brazos cargados de sueños. Al mirarte, el bullicio de mi alma me aturdio, mis latidos sonaban como truenos silenciosos en equilibrio sobre la desesperación. Espero que desaparezca la finitud del tiempo para que tú cuerpo sea eterno junto al mío.

martes, 28 de enero de 2014

Diecinueve

Entiendo que quieras escuchar: "Amo tus alas de mariposa cuando en tus miradas buscas adormecer mis ojos sobre tú cuerpo. Amo las pequeñas mentiras que en tú boca dicen mis verdades. Amo tus latidos cuando te vas y me extrañas un poco más. Amo el paisaje de petalos donde tus labios es lo único que me envuelve en sus locuras. Amo cuando te paras intacta a mi lado y me susurras en el oido que ya es tarde y debemos ir a la cama. Amo cuando tus ojos se hunden en mi alma y tus brazos me acorralan entrecortando mis palabras". Pero no, con el alma ajada y el cuerpo golpeado de tantas mentiras. Con la feria de los domingos donde no me dan ni un tomate a cambio de mi poesia. No me importa llenar el estomago con tus besos y que mi sangre se alimente de tú dulzura. Aunque mi oro, mi trigo y mi miel lo guardas en tú pecho, y tú dignidad no la pierdes porque camino descalzo, no puedo sufrir para que se desborden las palabras tuyas, tengo que guardar mis lágrimas para estar cuando las manos pequeñas se extiendan y me pidan un corazón duro para golpear y golpear la injusticia hasta poder enderezarla. Quiero amarte en libertad.

sábado, 11 de enero de 2014

Dieciocho

Quiero brazos de acero y miel, cuerpo de quebracho y un espíritu legendario. Quiero poder tejer mis palabras con hebras de jazmín y encontrar donde nace tu alma para abrazarla hasta morir. Pero, soy un salario amargo con las manos manchadas de tanto escribir, no se si tengo alma, tengo un cuerpo gastado y no por el tiempo. Es todo lo que tengo y es tuyo, hasta que llegue el momento de dar mi ultimo paso y caer en el vacío donde nací.

domingo, 5 de enero de 2014

Diecisiete

El amor duele. Es fuego sobre el alma. La piel extraña, aún los arapos que nos dejó. No hay lágrimas que limpien los recuerdos del corazón encadenado al pasado. Decidimos bien, entregamos nuestro cuerpo envuelto en la transparencia del alma. Las mentiras nos quieren hacer cómplice de la muerte de un deseo.

Dieciseis

He recogido con las plantas de mis pies tus lagrimas calladas , cerca de tu silencio. Torciste mi alma con tu capricho sin conciencia. Rompiste el pescuezo de mi deseo con la habilidad del verdugo justiciero. Entras y sales de mi pecho como un latido que destroza mis geranios y degüella sus flores sin importarte donde clavas tus palabras. Achatas el cielo y le quitas mis lunas. Pateas el jardín donde están tus pétalos. El eco de tus gritos embarran mi garganta mientras mi boca se humedece en el arroyo de tu cuerpo transparente. Vuelve a los brazos extraños de alcanfor y conserva tu cuerpo solo con las manchas del tiempo.